Please ensure Javascript is enabled for purposes of website accessibility

Resumen: A partir del 11 de abril de 2025, el gobierno exigirá que cualquier no ciudadano mayor de 14 años que no esté registrado y haya estado en el país por más de 30 días solicite el registro y la toma de huellas dactilares.

Cuando Donald Trump asumió la presidencia, una de las primeras órdenes que firmó exigía que cualquier no ciudadano mayor de 14 años que hubiera estado en EE. UU. por más de 30 días solicitara el registro y la toma de huellas dactilares mediante el Formulario G-325R. Para los no ciudadanos menores de 14 años, sus padres están obligados a registrarlos. Esta orden entrará en vigor el 11 de abril de 2025. Cualquier no ciudadano que no esté registrado deberá hacerlo bajo pena de enjuiciamiento. Además, se exige que cualquier no ciudadano registrado o que se registre, informe al gobierno dentro de los 10 días sobre cualquier cambio de dirección.

Esta orden está dirigida a aquellas personas que ingresaron a EE. UU. sin haber sido inspeccionadas al entrar, ya sea con visa o algún tipo de estatus. Muchas personas que han solicitado algún beneficio migratorio o que han estado en procedimientos migratorios probablemente ya estén registradas.

¿Quién se considera registrado?

  • Residentes permanentes legales (titulares de green card)
  • Personas que recibieron libertad condicional (parole), incluyendo “advance parole” (aunque haya expirado o sido revocado)
  • Personas que ingresaron a EE. UU. con una visa (aunque haya expirado)
  • Personas en procesos judiciales migratorios (deportación/remoción)
  • Personas con autorización de empleo (permiso de trabajo), incluso si está vencido
  • Refugiados
  • Personas que han solicitado la residencia permanente legal (aunque haya sido denegada)
  • Personas con tarjetas de cruce fronterizo o que ingresaron como “tripulantes” (crewman) 

¿Y qué pasa con DACA, TPS o asilo?
Si tienes un permiso de trabajo bajo alguna de estas categorías, se te considera registrado. Si tienes “advance parole” bajo alguno de estos programas, también se te considera registrado. Sin embargo, si solicitaste o recibiste DACA, TPS o asilo pero no recibiste un permiso de trabajo, no se te considera registrado.

¿Me deportarán si me registro? ¿Qué pasa si no me registro?

No hay una sola respuesta para esta pregunta; dependerá de tu situación específica. Registrarte puede tener consecuencias negativas que cambien tu vida, y no registrarte también podría traer consecuencias graves.

La siguiente información proviene directamente del sitio web del National Immigration Law Center:

Consecuencias migratorias:
El gobierno podría —y ha indicado que probablemente lo hará— tratar de arrestarte y deportarte utilizando la información que proporciones al registrarte. Dependiendo de tu situación individual, Inmigración y Control de Aduanas (ICE) podría enviarte una carta indicándote que te presentes en una oficina de ICE. Al presentarte, ICE podría detenerte o iniciarte un proceso de deportación. Si no puedes demostrar que has estado en EE. UU. por más de dos años, ICE podría someterte a una “remoción expedita”, un proceso de deportación acelerado que permite deportar rápidamente sin pasar por un juez.

Consecuencias penales:
Registrarte también podría exponerte a que el gobierno te acuse de un delito relacionado con inmigración. Si has estado en EE. UU. menos de cinco años y entraste sin ser inspeccionado, podrías ser acusado del delito federal de entrada ilegal. Si fuiste deportado anteriormente y luego regresaste cruzando la frontera sin autorización, podrías ser acusado del delito federal de reingreso ilegal.

El gobierno también ha amenazado con consecuencias para quienes están obligados a registrarse y no lo hacen, incluyendo sanciones penales y migratorias.

Consecuencias penales específicas:
El gobierno ha amenazado con presentar cargos penales contra personas que no se registren a pesar de estar obligadas a hacerlo, y la administración Trump ha indicado que los fiscales federales deben dar prioridad a estos casos. Esto significa que cualquier contacto con autoridades, como ICE o la policía local, podría resultar en cargos penales por no registrarse, además de detención migratoria y posible deportación. En particular, se podrían presentar los siguientes delitos menores federales:

  • No registrarse, con una multa de hasta $5,000 o hasta seis meses de prisión.
  • No portar prueba de registro, con una multa de hasta $5,000 o hasta 30 días de prisión.
  • No notificar al gobierno dentro de los 10 días de un cambio de dirección, con una multa de hasta $200 o hasta 30 días de prisión. 

Además, hay un delito penal separado y motivo de deportación si se utiliza información falsa para registrarse.

Consecuencias migratorias adicionales:
La mayoría de los beneficios o visas migratorias son “discrecionales”, lo que significa que el gobierno puede negar esos beneficios si la persona ha tenido acciones negativas en el pasado. Si no te registras y luego solicitas un beneficio o visa, el gobierno podría denegarlo por haber incumplido el requisito de registro.

¿Cómo me registro?

Primero debes crear una cuenta en línea en el sitio web de USCIS. Luego, debes presentar el Formulario G-325R. Este formulario solicita información como tu nombre, dirección postal y física, país de nacimiento, historial migratorio, actividades planeadas en EE. UU., antecedentes penales, información sobre familiares, entre otros datos. No hay ningún costo para presentar este formulario.

Fuente:
https://www.nilc.org/resources/know-your-rights-trumps-registration-requirement-for-immigrants/

  • English